El Ejecutivo se ampara en que hay una ley que defiende a las víctimas, a las que animan a denunciar. Pedro Sánchez a través de un tuit apoya a todas las mujeres que sufren agresión.
Yolanda Díaz también se posiciona en el acompañamiento a las mujeres acosadas.
Desde izquierda unida se exigen responsabilidades y se asegura que Sumar debe una "reparación ética y política al país" por carecer de mecanismos eficaces ante casos de acoso.
La dimisión forzada de Iñigo Errejón supone un nuevo golpe para el Gobierno de coalición, ya afectado por el caso Koldo. Tras conocerse la noticia este jueves, todos guardaban silencio hasta que Pedro Sánchez lanzó un mensaje a través de X, mostrando su condena para los que atentan contra el proyecto de igualdad y apoyando a las mujeres acosadas.
Este caso es especialmente duro para un gobierno que presume de ser feminista. Hoy la ministra de Igualdad, Ana Redondo, se mostraba contundente contra la acción de Errejón.
En el Ejecutivo crece el desanimo, especialmente en la parte de Sumar, cuya situación ya era delicada por la bajada de apoyo ciudadano y su rivalidad con Podemos, que se refuerza amenazando incluso con tumbar los presupuestos si no se aceptan sus condiciones. Por eso la líder de Sumar lanzaba un mensaje como vicepresidenta segunda del gobierno en el que aseguraba que "toca escuchar a las mujeres que denuncian y acompañarlas"
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, ha destacado la "contundencia" con la que ha reaccionado Sumar y se ha mostrado convencida de que esta formación política colaborará con la Justicia "en todo lo que sea requerida".
Desde izquierda unida se exigen responsabilidades y se asegura que Sumar debe una "reparación ética y política al país" por carecer de mecanismos eficaces ante casos de acoso.
Aunque todos los ministros intentan dar una imagen de normalidad y aseguran que hay gobierno para rato el hecho es que el temor a que la legislatura no resista empieza a crecer en toda la izquierda.