La fiscal antidroga de Andalucía ha explicado que se les siguen imputando delitos graves de contrabando y pertenencia a organización criminal.
Villagómez justifica que el principio de la investigación sí había elementos de imputación.
Las defensas creen que ya no hay motivo para mantenerlos en prisión.
Imputados y familiares proclamaron su inocencia desde el primer momento.
La Fiscalía pedirá que los seis detenidos por el asesinato de dos guardias civiles en el puerto de Barbate (Cádiz) el pasado 9 de febrero sigan en prisión porque, aunque ya no se los pueda considerar autores materiales de la muerte de los agentes según un informe de la UCO, sobre ellos pesan acusaciones por delitos de narcotráfico. Los investigadores de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y de la Policía Judicial de la Comandancia de Cádiz han determinado que la narcolancha que pilotaba Francisco Javier M. P., Kiko el Cabra, no fue la que embistió y mató a los agentes en ese puerto gaditano.
La fiscal Antidroga de Andalucía, Ana Villagómez, ha asegurado en declaraciones facilitadas a los medios que, a pesar de este último informe de la Guardia Civil, a los seis se les siguen imputando delitos graves de contrabando y pertenencia a organización criminal. Tales delitos están castigados con penas que pueden alcanzar los 7 años de prisión, por lo que no considera que se deban variar las medidas cautelares de prisión adoptadas.
"Toda investigación penal es un proceso dinámico, en el curso del cual van concretándose indicios, apareciendo otros o, como en este caso, descartándose algunos", ha asegurado Villagómez, quien cree que se trata de algo "absolutamente normal, porque la Justicia requiere su tiempo y no es instantánea".
La fiscal ha explicado que las investigaciones sobre delitos tan graves como el que sucedió en Barbate, con las circunstancias tan complejas que se han de investigar, "requieren de métodos técnicos y científicos que llevan su tiempo".
Ha añadido que "desde el primer momento" se tuvo en cuenta por los investigadores, por el instructor y la Fiscalía el "descargo" ofrecido por los investigados y sus defensas, y ha insistido en que todos los vídeos han sido analizados por expertos ingenieros de criminalística de la Unidad Central Operativa (OCU) de Guardia Civil, "haciendo una comparativa de todos y elaborando una secuencia de cómo sucedieron los hechos".
Villagómez cree que, en un primer momento, sí había elementos para sostener la imputación de los investigados, aunque "una investigación exhaustiva puede dar lugar al hallazgo de nuevos datos y de nuevas conclusiones". La Fiscalía, tal como advierte el informe de la Guardia Civil, también concluye que los investigados no son los autores del asesinato, lo que en su opinión indica que el instituto ha actuado "de manera imparcial y profesional pues lo único que buscan es la verdad".
LAS DEFENSAS PIDEN SUP UESTA EN LIBERTAD
Las defensas de los seis detenidos por el asesinato de dos guardias civiles en el puerto de Barbate (Cádiz) el pasado 9 de febrero han reiterado, tras el informe de la Guardia Civil que ya no los considera autores materiales de la muerte, su petición de puesta en libertad ante el juzgado que lleva este caso.
Fuentes judiciales ha informado a EFE de que esta solicitudes se producen después de que los investigadores de la Unidad Central Operativa (UCO) del instituto armado y de la Policía Judicial de la Comandancia de Cádiz hayan determinado que la narcolancha que pilotaba Francisco Javier M. P., Kiko el Cabra, no fue la que embistió y mató a los agentes en ese puerto gaditano.
En sus declaraciones en el juzgado, los seis arrestados ya negaron en todo momento que fueran ellos los que viajaban en la narcolancha que embistió a los guardias civiles.
Ante las dudas suscitadas, el juzgado de Barbate que investiga el caso pidió a un juzgado de la localidad cercana de Chiclana de la Frontera que le informara sobre el hallazgo de otra embarcación similar en su costa al día siguiente de los hechos.
Los seis acusados han coincidido en afirmar que aquella noche estaban en el puerto de Barbate en una narcolancha de cuatro motores y dos antenas, pero que no embistieron la embarcación de los agentes.
Lo que sí hicieron fue grabar con sus móviles lo que ocurrió, unas imágenes que sus defensas remitieron al juzgado para que fueran analizadas
Este viernes está previsto que declaren como testigos, ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Barbate, (Cádiz) los cuatro guardias civiles que sobrevivieron al ataque, según ha informado la Asociación Profesional Guardia Civil JUCIL, que va a estar en la localidad para mostrar su apoyo a estos compañeros.
LOS ENCAUSADOS Y SUS FAMILIAS NEGARON LA AUTORÍA DESDE EL PRIMER MOMENTO
Esto decían las familias de los encarcelados, pero es que además, en sede judicial, uno de los detenidos iba un paso más y señalaba incluso a un conocido narco de nombre Karim.
Los familiares de los encarcelados por estas muertes también, desde el inicio, defendieron su inocencia... Aseguraban que existía un video grabado desde la propia narcolancha que pilotaba Kiko "el cabra", que demostraba que él no había sido quien atropelló a los agentes.